Luis Zabala comenzó hace más de 40 años con un taller de maquinarias agrícolas, hoy –junto a dos de sus hijas es el responsable de “Construcciones Metalúrgica Zabala” que engalana una de las empresas destacadas en Tres Algarrobos, partido de Caros Tejedor.
“Empecé con una sociedad “Alemani-Zabala” con un taller de reparación de maquinarias, estuvimos juntos durante 5 años y luego, hace 43 años seguí con la metalúrgica, hasta el día de hoy en que ya soy como un responsable a medias”-dice Luis con humor- porque las hijas se hacen cargo de la parte administrativa y trato con proveedores y clientes-comienza diciendo Luis-
“Junto a Alicia- mi esposa que hoy ya no está-nos sacrificamos mucho para ir creciendo y hoy nuestro fruto se ve, somos una empresa familiar que concentra a 12 empleados directos, dos de nuestras hijas trabajan aquí y siempre estamos apostando a crecer”.
“Hemos pasado por varias crisis económicas en el país y de todas hemos podido salir, las empresas cuando vienen organizadas, generalmente no nos va mal, quizá con altibajos, pero siempre preparados para afrontar y sobrellevar situaciones difíciles con responsabilidad, hemos tenidos años muy buenos en los que crecimos y en otros nos mantenemos”- reflexiona Luis-
Actualmente están incorporadas a la empresa dos de sus cuatro hijas, Valeria y Natalia Zabala, quienes después de formarse en sus estudios fuera de la ciudad, volvieron a su pueblo natal y se encuentran al frente de la metalúrgica que destaca sus verdes colores en el acceso de ingreso de Tres Algarrobos.
“Ya hace once años que estoy y tuve la suerte de venirme cuando la empresa estaba en expansión, mudándose a este nuevo espacio, más confortable para trabajar, siempre supe que volvería a mi terruño, en los primeros años míos aquí, vi un importante crecimiento, estos últimos tres años han sido más duros, estamos muy relacionados al campo y la sequía y la economía inestable no nos ha favorecido, el trabajo se ha vuelto más difícil en el día a día y eso no nos permite planificar o pensar a futuro”- confiesa Valeria-
“Aquí tenemos repartidos los roles de trabajo yo y mi hermana Natalia estamos a cargo de lo administrativo financiero, nos manejamos comercialmente con proveedores y papa está siempre en el sector productivo ya sea el manejo del personal de taller de reparaciones, fabricación de galones y tinglados”.
En cuanto a la relación comercial que ambos tienen Valeria asegura que “ahora nos complementamos mejor, aunque en los primeros años nos peleábamos más, yo venía con una experiencia diferente, la de trabajar en empresas multinacionales en Bs As, que es otra realidad, el cliente allí es un número, aquí sin embargo con el cliente se entabla una relación de amistad y hasta a veces familiar y hay una visión no solo comercial, sino de solucionarle el problema, más allá de vender un producto o un servicio”-asegura-
En tanto Luis, reconoce que el arribo de Valeria a la empresa trajo un orden administrativo que le ayudó a resolver muchos obstáculos económicos que se habían dado- junto a su esposa- por la expansión de la metalúrgica “A mí me costaba ocuparme de los cobros, yo tenía con el cliente una relación de amistad y se me iba atrasando el ingreso de cheques, en esa época los sistemas de pagos eran diferentes, realmente con Valeria y Natalia eso fue cambiando y nos favoreció. Hace 11 años cuando ella llegó acá, le dejé todo arriba del escritorio y no me ocupé más de la parte comercial, no entré nunca más al banco “-expresa Luis con énfasis-
En el mismo sentido y reconociendo que ambos aprenden el uno del otro, Valeria asegura que de Luis aprendió la tenacidad. “Mi papa es muy tenaz, en cambio yo soy más conservadora, el encara y le mete para adelante, siempre y en general, no sé si por suerte o sabiduría, no la pifia tanto- dice entre risas- antes se complementaba con mi mamá, quien colaboraba en lo administrativo, hoy lo hace conmigo, yo a veces lo freno un poco, contemplo y analizo más, él es más eufórico en eso, así hacemos un buen equipo de trabajo”
En cuanto a la visión de futuro Luis asegura tener muchas expectativas, “No va a ser fácil, pero me entusiasma que hayamos cambiado el camino, que busquemos otra línea, si bien esto nos va a doler mucho, veo otra manera de salir de un estanco”-reflexiona-
“En tanto Valeria aporta que “ Es difícil en este momento de cimbronazo económico poder proyectar cosas buenas, porque yo no miro por mi sola, nuestro trabajo en particular depende además de la situación macroeconómica y política, de cómo le vaya a campo y ese sector depende muchas veces de las condiciones climáticas, por lo que, si hay una mala campaña y una buena política no se siente tanto , en este momento uno mira más allá de eso y ahí veo un año difícil por delante, aunque tenemos que esperar lo bueno y trabajar cada uno en lo que sabemos hacer, lo mejor que podamos .
En cuanto al deseo para el 2024 ambos coinciden en que esperan generar más fuente de trabajo, “Para eso esperamos una estabilidad económica que permita lograrlo, ya que ha sido el objetivo principal del crecimiento de esta empresa-concluyen-